jueves, 4 de septiembre de 2014

ALGUNAS CONSIDERACIONES SOBRE LOS ANIVERSARIOS DE LA HERMANDAD DE NUESTRO PADRE JESÚS NAZARENO Y NUESTRA SEÑORA DE LA SOLEDAD


Estamos a punto de celebrar el aniversario preparado por la Hermandad torrijeña este próximo domingo 7 de septiembre de 2014 como del 150 Aniversario de Jesús Nazareno y del 250 de la Virgen de la Soledad; pero habría que precisar un poco más en las fechas, a la luz de nuevos documentos localizados en Toledo.

Como ya expusimos en el libro “Cofradías y Hermandades en la Villa de Torrijos”, las primeras noticias que habíamos encontrado referentes a la imagen de Ntro. Padre Jesús Nazareno en su altar aparecieron en el año 1864, en un inventario que realiza D. Lucio de la Vega, administrador del Hospital de la Santísima Trinidad y Consolación siguiendo las instrucciones de D. José Genaro Villanoba, apoderado general testamentario del duque de Maqueda D. Vicente Pío Osorio de Moscoso.

Con respecto a la Hermandad, en la visita eclesiástica de 1867 nos dice el párroco torrijeño que hay varias asociaciones particulares (de socorro mutuo) entre las que se encuentra la de Jesús Nazareno. Es por tanto, el germen de la devoción por dicha imagen, que se verá ampliada por su fundación canónica a comienzos del siglo XX por D. Balbino Longobardo Vera, D. Federico Díaz y D. Eduardo López, todos ellos ilustres hijos de esta villa de Torrijos. (Con lo que las fechas del Aniversario de Jesús Nazareno cuadrarían).

Fue refundada a mediados de los años cuarenta del pasado siglo tras el paréntesis de la Guerra Civil, bajo la presidencia de D. Gil Díaz.

En aquellos años, la Hermandad celebraba sus Juntas Generales en el domicilio del hermano D. Hipólito Rico, al final de la calle de la Estación, junto al surtidor de gasolina.

Gran impulsor de esta Hermandad fue el que sería Presidente de la misma durante muchos años, D. Rufino España Andújar. Los hermanos se reunían para las procesiones de Semana Santa en el domicilio del Hermano Presidente, D. Gil Díaz, en la calle del Tejar, esquina del callejón del mismo nombre.

Los actuales estatutos de la Hermandad reflejan fielmente los objetivos principales para los que fue fundada en el pasado siglo. Todos ellos recogidos en el Título II, artículo 7:

1º) Promover, desarrollar e incrementar, según las normas de la Iglesia, el culto público y privado en honor de nuestro Señor Jesucristo, bajo el título o advocación de Jesús Nazareno.

2º) Promover entre los hermanos una vida cristiana más perfecta y contribuir a la edificación cristiana de la sociedad en que viven.

3º) Fomentar el espíritu y vida litúrgicos en los actos de piedad.

4º) Buscar una sólida formación bíblica y ascética mediante actos adecuados para ello.

5º) Practicar obras de caridad y asistencia social, no sólo entre los hermanos, sino entre todos los necesitados, sin excepción ni distinción.


Como hemos dicho más arriba, y a la luz de nuevos documentos, podemos afirmar con rotundidad que la Esclavitud de Ntra. Sra. de la Soledad de Torrijos se funda en el año 1722 en el Hospital de la Santísima Trinidad, integrada por hermanos de ambos sexos. (Por lo tanto se cumpliría el 292 Aniversario de su fundación).

Así consta en un documento que alude a “un libro empergaminado y sin foliar intitulado Libro de la Esclavitud de Nuestra Señora de la Soledad, de Torrijos, que fue el primero de su serie (y actualmente desaparecido).

En enero de 1764, don Tomás de Marcos Molina, Visitador Eclesiástico del Partido de Santa Olalla, Rodillas y Montalbán, informa al Consejo de Gobernación de la Catedral de Toledo sobre la necesidad de revisión de las Ordenanzas de la Cofradía de la Esclavitud de Ntra. Sra. de la Soledad. El procurador de número de la ciudad de Toledo, don Nicolás Martín Pintado, recoge el informe del párroco de la iglesia de San Gil, don Juan Recio, quien con fecha 19 de febrero de dicho año, considera que no hay inconveniente alguno para la aprobación de dichas Ordenanzas. Elevan dicha petición al Consejo de Gobernación en nombre de los otorgantes y hermanos de la cofradía, don Bernardino Carlos de Vilches, secretario de la misma, Isidro Saiz, Diego Garrido, Luis Domínguez, Cristóbal Torrijos, José López Caudilla, Melchor Fernández y Jerónimo Vázquez, en nombre de los treinta y tres hermanos que componen la cofradía.

El Notario Público y Apostólico, vecino de Torrijos, don Juan Pérez Menor, traslada copia de las Ordenanzas, recogidas del pergamino, al Cardenal-Arzobispo de  Toledo, Don Luis Antonio Fernández de Córdoba y Portocarrero, conde de Teba, y el Consejo de Gobernación “aprueba en la forma ordinaria” dichas Ordenanzas con fecha 23 de febrero de 1765.

Entre las obligaciones a que se comprometen los hermanos y hermanas (“esclavos”) de la cofradía figuran:

·   Asistencia con hacha a la misa solemne del 8 de septiembre, festividad de la Natividad de Nuestra Señora, y de velar de cuatro en cuatro durante una hora.

·   Que los hermanos que así lo deseen puedan confesar y comulgar en dicho día contando con la asistencia del capellán, quien recibirá limosna por parte de la hermandad por tal servicio espiritual.

·   Asistencia al funeral del hermano o hermana que falleciere.

·   Obligación de asistir con el hacha a la procesión del Viernes Santo, respetando la preferencia en el orden de la misma de las “señoras mayordomas”.

·   Mandar decir dos misas si falleciese el capellán de la cofradía.

·   Al fallecer un hermano, puede solicitar el ingreso en la cofradía, si así lo desea, la viuda o su hijo mayor.

Más noticias sobre esta hermandad las extraemos del Expediente General de Cofradías (60 reales en gastos para la celebración de función religiosa) y del “Almanaque Parroquial de Torrijos (Toledo). Año I. 1929”, dirigido por el párroco de la Colegiata, beato don Liberio González Nombela. Era entonces su Presidente don José Gómez de Agüero y contaba con 85 cofrades, siendo de las más numerosas de entre las cofradías torrijeñas en aquel período.

Tras el paréntesis de la Guerra Civil, en la década de los cuarenta, la hermandad cuenta sólo con mujeres, aunque sus directivos son varones (D. Valentín Martín Doblado, D. Buenaventura Martín, D. Enrique Peña Villanueva, entre otros). Esta hermandad solía celebrar sus reuniones o asambleas en un local de la carretera de Gerindote, propiedad del inolvidable Doctor don Enrique Peña Villanueva, donde actualmente se encuentra la oficina de Correos.

A mediados de los ochenta del pasado siglo, la hermandad de Nuestra Señora de la Soledad será asumida por la de Jesús Nazareno, que la dotará de precioso estandarte y manto dignos de tan excelsa devoción.

La imagen de la Virgen, del siglo XVIII, es de vestir; es decir, sólo tiene talladas las manos y la cara, quedando el cuerpo con un simple armazón de madera que se tapa con los bellos trajes que posee Ntra. Sra. Ésta se guardaba y guarda en la antigua Capilla de los Cebreros, donde anteriormente estuvo la del Santísimo Cristo de la Sangre antes de ser ubicada en el actual camarín del siglo XVIII. Curiosamente en el precioso manto de Nuestra Señora, el Jueves Santo, aparecía prendido un billete de cinco duros, de veinticinco pesetas. Nunca conocimos su anónimo o anónima donante...
 
Es impresionante la belleza del rostro de Nuestra Señora de la Soledad que se aparta de los cánones escultóricos de la escuela Castellana para acercarse a los de la Andaluza. Desconocemos su autoría, desgraciadamente.

En 1977, la hermandad encargó una carroza para las procesiones del Jueves y Viernes Santo, ya que anteriormente se sacaban a hombros.

En el año 1990, se cambió la indumentaria  de los hermanos en las procesiones de Semana Santa, pasando del capirote blanco, cruz morada en el pecho, túnica morada y fajín blanco al capirote morado, cruz blanca en el pecho, túnica morada con fajín blanco y capa del mismo color.

En 1994 se adquirieron túnicas nuevas para las imágenes de Jesús Nazareno y Ntra. Sra. de la Soledad, deterioradas por el paso del tiempo.

Un año después se restauró el estandarte de la Soledad, realizado por las monjas de nuestra localidad.

Felicitar desde aquí a la Hermandad en sus aniversarios, precisando que la Esclavitud de Ntra. Sra. de la Soledad es más antigua que lo supuesto hasta ahora, en más de 40 años…

Jesús Sánchez de Haro
Amigos de la Colegiata de Torrijos

Cronista Oficial de Carriches

miércoles, 11 de junio de 2014

TOMA DE POSESIÓN COMO CRONISTA OFICIAL DE LA VILLA DE CARRICHES

El próximo sábado 21 de junio, a las 12 de la mañana, en el Salón de Plenos de la Casa Consistorial carrichana tendrá lugar mi toma de posesión como Cronista Oficial de la Villa de Carriches (Toledo).


domingo, 2 de marzo de 2014

UN DETALLE...DESCONOCIDO


Os quiero acercar, en esta ocasión, una imagen muy conocida de nuestro retablo mayor de la Colegiata de Torrijos. Claro, desde otro punto de vista.

En muy pocas ocasiones hemos tenido la oportunidad de ver tan de cerca la escena de la Santa Cena, y tuvimos la oportunidad cuando se restauró en el año 2006. Los andamios nos lo pusieron muy fácil.

Se puede ver de cerca a varios de los apóstoles, San Juan postrado a los pies del Señor, el cáliz…la mesa del cenáculo (con el cordero, y varios panes) y un personaje desconocido que se asoma a la escena.


¿Alguien sabrá de quien se trata?

domingo, 9 de febrero de 2014

LOS INICIOS DE...MI HISTORIA


En estos días se cumplen 21 años de mi primer trabajo sobre Carriches, una primera historiografía carrichana que sólo publiqué para la familia, y de la que tengo muy buenos recuerdos. Un gran trabajo de recopilación, miles de horas de trabajo en diferentes archivos.

Ese gusanillo por esta ciencia humana surgió en el Colegio San Gil de Torrijos, de manos de mi maestro D. Julio Longobardo, y se vio aumentada ya en el Instituto Alonso de Covarrubias por otro de mis profesores de Historia, Florencio Huerta.

Después de ese curso, 3º de BUP, las investigaciones, cartas a los diferentes archivos, fotocopias de documentos, se hicieron muy comunes y necesarios en el devenir diario.

Muy pronto me llamaron para participar en la redacción de El Pregonero, el libro de las fiestas de Carriches, que por aquel entonces repuntaba en contenidos.

Buen ojo tuvo D. José Talavera, por entonces párroco de Carriches y encargado de escribir sobre la historia local, al encargarme el primero de mis artículos sobre la historia para El Pregonero de 1995: El órgano actual de la Cátedra de San Pedro.

Esa entrega y dedicación tuvo la primera de las recompensas, y no vino de manera oficial por ninguna institución, sino por la Asociación Cultural “Los Carrichanos” en agosto de 1996 que me entregó una placa “en agradecimiento a tus trabajos realizados sobre la historia de Carriches”.

Con sumo respeto, al año siguiente, me dedicaron en El Pregonero un artículo, en el que me daban la bienvenida a la inacabable tarea de servir a los demás. A la vera de La Encina, maduró la pluma de mis trabajos, mientras ya se estaba fraguando en ese tiempo la primera de mis publicaciones: realizar una crónica del acontecimiento histórico más importante de Carriches, la concesión del título de Villa.

Revisando los documentos me di cuenta de la fecha de la concesión, y que el 27 de noviembre de 1999 se cumplirían 250 años, y encima era sábado. Una oportunidad de celebrarlo por todo lo alto.



Todas esas ideas, ilusiones, el proyecto realizado, dieron lugar al nacimiento de la Asociación Patrimonio Cultural Villa de Carriches, allá por el año 1997, y la publicación de la Revista Cultural Adovea, una de esas “hijas” amada y cuidada con detalle.



Pero llegó el momento más importante, la celebración del 250 Aniversario del Real Privilegio de Villa, y con él mi primer libro en 1999.

Mucho trabajo, grandes sueños, importantes esperanzas, algunos desengaños, organizando un extenso programa de actos para ese aniversario, que se vino abajo, cual castillo de naipes al soplo de un mal viento.

Apartado de las celebraciones oficiales, tuvimos que organizar el acto de presentación en el Colegio de Carriches, ya que el nieto del tío Nino y la tía María o del tío Benito y la tía Tomasa, que tanto monta…, no tenía la suficiente “categoría” para hablar del Privilegio como podría tener el Presidente del CSIC, a pesar de conocerme al dedillo el dichoso documento.



Con la asistencia de mi familia, mis amigos, incluso D. Julio Longobardo, realizamos la presentación de “En Testimonio de Verdad”. El Conde de Orgáz tuvo el acierto de presentarse por sorpresa, y me agradeció personalmente el gran trabajo realizado.

Fue todo un éxito, de público, de ventas (se agotaron todos los ejemplares), y lo más importante, el reconocimiento que las instituciones quisieron arrebatarme para mayor gloria de sus representantes, me fue concedido por la gente del pueblo, los lectores, que son los que se interesaron por mi trabajo.

Desde entonces he seguido acercando el pasado común de los carrichanos hasta el presente, mediante artículos, publicaciones, entrevistas, etc. Porque cuando las tradiciones orales se van perdiendo a medida que los pueblos crecen, cuando los pequeños sólo escuchan a los abuelos cuando van a por “la paga”, cuando las fotos antiguas han desaparecido de nuestros cajones para dar paso a las viejas tecnologías... es entonces cuando cobran toda su importancia los encargados de documentar los tiempos presentes para que en el futuro sean recordados y no se olviden.

lunes, 20 de enero de 2014

SAN SEBASTIÁN Y LOS MORRACHES DE CARRICHES



Para Reyes comen los bueyes; para San Sebastián come el gañán.


Ya ha llegado el 20 de enero, y con él celebramos la festividad de San Sebastián, santo de singular renombre por su gran devoción en el siglo XVI gracias a su abogacía contra la peste y las epidemias.

Según la tradición cristiana, Sebastián fue un soldado romano que se convirtió al cristianismo y se le dio muerte por razón de su fe. La Iglesia le venera, por ello, como mártir. Se le representa semi-desnudo. De lo que no hay duda es de la presencia de este santo en la comarca según consta por la existencia de cofradías bajo su advocación en Malpica de Tajo, Torrijos, y también en Carriches.

Esta cofradía tenía su sede en la parroquia y no tenemos datos del año de su fundación, aunque existen noticias de ella a finales del siglo XVI.

Lo característico de esta cofradía carrichana son los famosos “morraches” conocidos por la localidad vecina de Malpica de Tajo. Carriches también tuvo estos danzantes, para pedir limosnas para la celebración de las fiestas del santo. Después de la Guerra de la Independencia, extinguida la cofradía, siguieron saliendo los morraches a pedir limosna, pero esta vez, se agregaron las rentas a la Cofradía de las Benditas Ánimas del Purgatorio.

jueves, 9 de enero de 2014

TORRIJOS HISTÓRICO, A VISTA DE PÁJARO



De regreso, en el nuevo año, os invito a conocer...y reconocer una imagen de Torrijos desde otro punto de vista...a vista de pájaro.

En ella podemos ver la Villa de Torrijos a mediados del siglo XX, con la Colegiata, la Capilla del Cristo (donde reconocemos la espadaña y el camarín), la antigua Casa de los Arce y el Cine Margoy en la Plaza del Cristo. También se conoce la chimenea de la alcoholera y con mucha vista...al fondo...el castillo de Caudilla.

Otra mirada, desde las alturas, de aquel Torrijos de nuestra memoria colectiva.